Hay días que desaparezco
parece que todo se nubla para adentro
y dejo de estar
cuando es imposible articular una palabra
ni siquiera moverme e intentar salir
atenazado de mí.
Gritaría, quiero gritar, pero no puedo
y soy una abstracción
alguien que me miro desde lejos
en otra dimensión y no es agradable
esa sensación de irte alejando
y luchando por volver, entrar, ser
traspasar ese umbral, es solo un paso,
un gesto, una palabra, un roce.